[2025]Opinión del curso «Mi Primera Venta en 7 Días”: mi experiencia real, paso a paso para generar ingresos online sin ser “vendedor”

¿Alguna vez has sentido que tu vida está en pausa? Que das todo en un trabajo que apenas te llena, mientras ves cómo otros avanzan, ganan más y parecen vivir en otro mundo… uno donde trabajan desde la playa, en pijama o viajando.

Yo estuve ahí. Y si estás leyendo esto, probablemente tú también.

No es solo frustración. Es sentirte atrapado. Como si tu potencial estuviera secuestrado por horarios rígidos, jefes sin alma o sueldos que no alcanzan. Y cuando por fin decides buscar algo diferente, lo que encuentras es un caos de promesas vacías: gurús que te venden humo, cursos carísimos que no explican nada o métodos lentísimos que no dan resultados.

Y si encima eres de los que no quiere mostrar su cara en TikTok ni hacerse influencer… todo se vuelve aún más cuesta arriba. Porque el mundo online parece estar reservado solo para los que gritan, bailan o se exponen.

Imagina esto: es lunes, suena el despertador, y ya estás agotado. Te levantas, te duchas, te metes al tráfico o enciendes el portátil con desgano. Y todo para cumplir con un horario que no elegiste, bajo reglas que no decidiste, por un sueldo que apenas te permite vivir.

No se trata solo de dinero. Se trata de no tener el control. De no poder decidir cómo ni cuándo trabajar. De sentir que das tu tiempo… y no te queda nada para ti.

Quizás ya diste el primer paso: buscaste en YouTube, en Google, en foros… Aparecieron términos como dropshipping, e-commerce, infoproductos, funnels. Te perdiste. O peor, invertiste en algo que prometía y no entregó.

Es como entrar a un supermercado gigante sin saber qué necesitas comprar ni cómo se cocina nada. Saliste con una mezcla de frustración y más dudas que antes.

Aquí viene otro freno común: “Tienes que construir tu marca personal”, “Hazte visible”, “Crea contenido todos los días”. ¿Y si no quiero? ¿Y si soy introvertido? ¿Y si simplemente no quiero mostrar mi vida en internet?

Yo también me sentí así. No quería bailar en Reels, ni hablarle a la cámara cada día. Quería generar ingresos, sí, pero sin tener que convertirme en influencer.

Y lo que más miedo da: “¿Cuánto cuesta empezar?”. Has visto cursos de 300, 500 o 1.000€. ¿Y si no funciona? ¿Y si es otra estafa más? ¿Y si vuelvo a perder dinero?

Ese miedo es real. Y paraliza. Porque el dolor de haber invertido sin resultados se queda ahí, como una cicatriz. Y uno empieza a creer que esto no es para uno, que solo los demás pueden lograrlo.

Vamos a hablar claro.

Más allá del dinero, lo que realmente quieres es libertad. No tener que pedir permiso para tomarte un día libre. Poder trabajar desde casa, desde un café, desde la playa… o simplemente desde donde te dé la gana.

Y lo que sueñas no es un golpe de suerte. Es aprender una habilidad valiosa, que esté en demanda, que puedas monetizar sin depender de nadie. Algo que te dé resultados visibles, rápidos, y te diga: “Esto funciona, y tú puedes hacerlo”.

Cuando escuchas la palabra “vender”, quizás piensas en alguien insistente, pesado, que intenta convencerte de comprar algo que no necesitas.

Pero vender no es eso.

Vender es ayudar a alguien a resolver un problema. Punto.

Imagina esto: tu mejor amigo tiene dolor de espalda. Le hablas de un cojín ergonómico que usas tú y le ha cambiado la vida. ¿Qué haces? Le cuentas tu experiencia, le pasas el link. Él lo compra. Se siente mejor. Te lo agradece.

Eso es vender. Solo que en el marketing de afiliados, tú además ganas una comisión por recomendar ese cojín.

Piénsalo así: eres como el puente entre una persona que necesita algo y la solución perfecta para eso.

Tú no creas el producto, no das soporte, no haces envíos. Solo conectas a quien lo necesita con la empresa que lo ofrece. Y si se concreta la venta, tú cobras.

Ejemplo práctico:

• Ves un curso online que te encantó.
• Te haces afiliado: te dan un enlace único.
• Compartes ese enlace con alguien que pueda necesitarlo.
• Esa persona compra. Tú ganas una comisión. Sin stock, sin clientes, sin complicaciones.

Cuando escuchas “curso online”, es normal pensar en vídeos eternos, teorías aburridas o un montón de información que no sabes cómo aplicar.

Pero “Mi Primera Venta en 7 Días” no es eso.

Este curso está pensado como si alguien te tomara de la mano y te dijera: “mira, haz esto, ahora esto otro… y aquí verás tu primera venta”.

Es como tener un mapa para salir del laberinto digital.

Un paso a paso claro, directo y sin complicaciones.

Antes de hablar de botones, anuncios y campañas, Fabio y Adri te preparan mentalmente.

¿Por qué?

Porque si vienes de fracasos anteriores, de dudas, de miedos… necesitas un reset mental.

Ellos te recuerdan que no eres un inútil ni un fracasado, solo te faltaba un método claro.

Ejemplo: Es como instalar una app en tu móvil, solo que aquí instalas tu «centro de control de ventas» en Facebook.

Uno de los mayores dolores es: “¿qué vendo?”.

En internet hay miles de productos, y elegir mal es perder tiempo y dinero.

Aquí, te lo dan ya hecho. Fabio y Adri ya probaron qué productos se venden, qué tienen demanda y buena conversión.

Ejemplo: Es como si quisieras abrir una tienda de ropa y ellos ya te dijeran cuál prenda se está vendiendo como pan caliente y te la dieran para vender tú también.

Esta es la parte mágica: donde entras al juego real.

No necesitas ser creativo ni diseñador. Solo copias lo que ellos ya hicieron. Los textos, las imágenes, las configuraciones. Tú replica. Ellos ya validaron que funciona.

Ejemplo: Imagínate que quieres hacer una tarta, pero nunca cocinaste. Ellos te dan la receta exacta, los ingredientes, los tiempos. Solo sigues pasos y… ¡listo! Tarta servida.

Y con una inversión de solo 30 €, puedes tener anuncios corriendo en cuestión de horas. Literalmente, podrías tener tu primera venta en menos de una semana.

Recuerdo perfectamente el día que empecé el curso. Estaba agotada de probar cosas que no funcionaban, con la sensación de que ya había perdido demasiado tiempo y dinero.

Pero algo me hizo clic. Quizás fue la promesa de que no necesitaba ser experta, ni mostrarme en redes, ni gastar una fortuna. Solo necesitaba seguir los pasos.

Así que dije: “una última vez”.

Siempre pensé que Facebook Ads era solo para agencias o expertos con pantallas llenas de gráficos.

Pero el módulo me llevó paso a paso.

Era como armar un mueble de IKEA… con instrucciones claras (¡por fin!).

Seguí todo: Business Manager, páginas, píxel.

Y lo mejor es que entendí lo que estaba haciendo. Eso me dio confianza. Sentí que ya no estaba en la oscuridad.

Aquí no tuve que navegar por Hotmart buscando entre cientos de cursos. Fabio ya me daba el producto: uno probado, con buena demanda, y que podía vender aunque nadie supiera quién era yo.

Fue como si un amigo que ya sabe lo que se vende me dijera: “vende esto, confía, ya lo validé”. Ese ahorro de tiempo fue oro.

Lo confieso: cuando escuché que podía copiar y pegar la campaña, pensé que era exagerado.

Pero no.

Literalmente, abrí el tutorial, pausaba el vídeo, hacía lo mismo en mi cuenta, y seguía. Al cabo de dos horas… tenía una campaña corriendo. Yo. Sin experiencia. Sin saber de embudos. Solo siguiendo instrucciones.

Vamos al grano.

¿Esto tiene cosas buenas? Sí. Muchas.
¿Tiene detalles a considerar? También. Y te los cuento todos.

Porque no estás aquí para que te vendan humo. Estás aquí para tomar una decisión que te cambie la vida (o no te haga perder tiempo otra vez).

❌ No es escalable a lo grande (para eso está el curso avanzado)
Este curso es para hacer tu primera venta, no para volverte millonario.

Si te gusta, puedes luego escalar con la formación más avanzada Partner 360.

Seré totalmente honesta: este curso no es para todo el mundo. Y eso está bien.

Porque si tú eres la persona correcta, este curso puede cambiar tu vida. Pero si no lo eres, mejor saberlo antes de gastar tu dinero y frustrarte.

🚫 No quieres invertir ni 30 € en publicidad
Aunque es una inversión mínima, si no estás dispuesto a invertir nada, no funcionará.

Sin anuncios, no hay ventas.

Si llegaste hasta aquí, no es casualidad.

Tú y yo sabemos que algo dentro de ti quiere dar el paso.

Estás cansad@ del mismo ciclo, de esperar el momento perfecto, de ver pasar las oportunidades mientras sigues atado a un trabajo o una rutina que no te llena.

Quizás has dudado, has tenido miedo, has fracasado antes.

Lo entiendo.
Pero también sé lo que se siente cuando por fin haces tu primera venta online.

No es solo dinero.
Es libertad.
Es validación.
Es darte cuenta de que tú también puedes.

“Mi Primera Venta en 7 Días” no es magia, pero sí es el método más directo y accesible para empezar de forma real, sin complicaciones, sin rodeos, y con resultados que puedes tocar en menos de una semana.

¿Es el curso más completo del mundo? No.
¿Te hará rico de la noche a la mañana? Tampoco.
Pero sí puede ser el comienzo del cambio que llevas años esperando.

Por solo 47 €, estás a un clic de empezar. Con una inversión simbólica, sin tener que exponerte, sin tener que ser experto.

Y con algo aún más valioso: la posibilidad de creer de nuevo en ti.